El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, reafirmó este jueves que su Gobierno no tiene previsto implantar el llamado «pasaporte sanitario» en el país, pues la «libertad está por encima de todo» y cada ciudadano puede decidir si se vacuna o no.
La adopción del «pasaporte sanitario» ha sido exigida en los últimos días por diversos sectores científicos, después que se han comprobado los primeros casos de la variante ómicron de la covid-19 en el país, en personas que llegaron desde Sudáfrica o Etiopía.
En un acto celebrado en el palacio presidencial, Bolsonaro dijo este jueves que la sociedad debe entender que «el virus será para siempre» y que «las vacunas, algunas todavía experimentales, otras no, tienen muchas incógnitas por delante».
El líder de la ultraderecha citó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) y alertó de que «los totalmente vacunados pueden ser contaminados y transmitir el virus y también pueden morir», para justificar su decisión de no imponer la inmunización obligatoria.
Bolsonaro, quien se niega a aplicarse una vacuna y desde el inicio de la pandemia desdeña de sus efectos, reiteró que «la libertad» de los individuos está «por encima de todo». EFE